NOMBRE: Amparo de Toro Martínez
PROFESIÓN: Ädministrativa
AÑOS DE TRAYECTORIA: Ocho
LINKS: facebook.com/amparo.detoromartinez
PREGUNTAS:
1. ¿Qué te atrajo de la danza oriental? / ¿Cómo fueron tus inicios?
Un día, paseando por la puerta de un teatro ví un cartel donde se anunciaba un festival de danza oriental, me quedé mirándolo con mi marido de la mano y le dije: un día me verás ahí, tengo que aprender. Él no le dio importancia, sólo dijo: ¿Te atreverías? Y se río. Ni que fuera tirarse en paracaídas-pensé yo. En fin, lo que verdaderamente me atrajo fue el hecho de aprender a bailar algo que pudiera hacerme sentir libre, orgullosa de mí misma, emocionada, feliz y poder demostrar que nunca es tarde para realizar algo que te ha gustado desde que empezaste a andar. Desde muy pequeña he soñado con el mundo de la danza, la interpretación, la música, etc.
Una noche de agosto, nuestra compañera y amiga Marien me propuso probar una clase de danza oriental con Ana Siscar, yo no sabía quién era, en realidad no sabía nada sobre danza oriental. El primer día de prueba fue como un flechazo, pensé, esto es lo mío, esto es lo que quiero aprender, esto es lo que estaba buscando. Así de rápido y sencillo, desde entonces hasta ahora. El primer año lo pasé practicando los básicos por mi casa como si estuviera loca, rompí una lámpara de cristal practicando velo con mi mantilla de fallera ya que todavía no había comprado ninguno, Ana nos dejaba los suyos en clase para empezar a aprender. En fin, qué os voy a contar que no hayáis hecho muchas de vosotras….jajajajajaja.
2. ¿Qué te aporta o te ha aportado?
Voy a ser muy escueta. me aporta paz, felicidad, poder compartir con mis compañeras algo que nos une con la misma pasión y ganas de superación.
3. ¿Qué es para ti la danza oriental, y qué supone en tu vida?
La danza oriental en mi vida conlleva tantas cosas que ya no la concibo sin ella, gran parte de culpa la tienen mis compañeras, el ambiente de complicidad y amistad que hemos construido. Sentirte arropada cuando estás triste, cansada, desmotivada o enferma. Todavía no he bailado sola ni creado una coreografía en solitario, creo que bailar en grupo es lo que más me enriquece.
4. Todo bailarín en algún momento tiene que lidiar con la desmotivación, ¿qué le dirías a alguien que atraviesa ese periodo?
Le diría que lo difícil es arrancar cuando estás con la batería casi consumida, pero que con un buen empujón de quién te quiere enseguida se emprende de nuevo la marcha.
5. ¿Cómo te afectan los nervios antes de una actuación? ¿Eres de que se cierra y se concentra o de las que no pueden parar quietas?
Unos minutos antes es como si me hubiera poseído un ente bobalicón que se queda en babia, me cambia la expresión de la cara, no parezco yo. Creo que eso lo voy superando poco a poco con el tiempo, ahora ya no siento tanto hormigueo en el estómago y consigo salir con algo más de seguridad.
6. ¿Has alcanzado sueños/metas/objetivos? ¿Cuáles?
Mi meta era aprender, actuar en público y compartir lo que me hace sentir la danza oriental. En cuanto al aprendizaje, aún no he alcanzado esa meta, creo que nunca se alcanza, siempre hay cosas que aprender.
7. ¿Qué cualidades son para ti imprescindibles en un gran bailarín/maestro?
Profesionalidad, paciencia, alma y seriedad.
8. Imagínate que tienes que explicarle la Danza Oriental a alguien que no la conoce ¿Cómo la presentarías?
Lo he hecho con algunas amigas, siempre digo que es una danza completamente desconocida, porque hasta que no la practicas y empiezas a conocerla a través de tu maestra, no te das cuenta de lo verdaderamente rica que es. Siempre explico que te hace sentir muy femenina, hace que te emociones, te diviertas y hace que salga la mujer tierna y a la vez fuerte que llevas dentro.
9. ¿Bellydance o folclore?
Todo.
10. ¿Qué ha sido lo más difícil para ti en tu trayectoria? ¿Y lo más fácil?
Lo más difícil para mí aprender la técnica de algunos pasos, lo más fácil la interpretación.